
septiembre 11, 2025
by Carolina Ulloa
Administración, Blog, Experiencia UTH Florida, Recursos Humanos
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¿Cómo hacer preguntas verdaderamente poderosas como líder?
A medida que avanzas en tu carrera, tu valor deja de medirse por lo que haces y comienza a medirse por lo que logran las personas a tu cargo. En ese cambio, las preguntas que formulas se vuelven herramientas estratégicas: abren perspectivas, generan responsabilidad y crean espacios para que las mejores soluciones emerjan del equipo.
Las respuestas suelen ser un resultado directo de un contexto: herramientas, procesos, ejecución. Las preguntas, en cambio, moldean el contexto. Una pregunta bien planteada:
- Revela información relevante en entornos complejos.
- Enfoca la atención del equipo en lo que realmente importa.
- Empodera a otros para pensar y actuar con autonomía.
- Construye confianza cuando se percibe interés genuino.
Los 5 ingredientes de una pregunta poderosa
- Genuina curiosidad
Evita las preguntas con intención oculta o condescendencia. Una buena pregunta nace del “quiero entender” y no del “te voy a mostrar que estabas equivocado”. - Abierta, no cerrada
Prefiere interrogantes que inviten a explicar y explorar (qué, cómo, cuál) en lugar de preguntas que sólo pedirían “sí/no”. Las abiertas permiten matices y aprendizaje. - Formulada de manera alentadora
Elige palabras que reduzcan defensas. En vez de “¿por qué hiciste esto?”, prueba “¿qué criterios consideraste para tomar esta decisión?” o “¿qué fue lo más importante para ti en esa elección?”. - Profundidad sobre amplitud
Mejor una buena pregunta que genere múltiples ángulos sobre un tema clave, que muchas preguntas superficiales sobre muchos temas. Profundizar produce entendimiento accionable. - Concisa
Mantén la pregunta breve. Evita “preguntas apiladas” o largas explicaciones antes de preguntar. Haz la pregunta y guarda silencio para escuchar.
Cómo practicarlo (3 pasos prácticos)
- Preparar: Antes de una reunión, identifica el objetivo principal y escribe 1 a 2 preguntas abiertas que busquen claridad o impulso sobre ese objetivo.
- Preguntar: Formula la pregunta con curiosidad y sin tono acusatorio. Manténla corta.
- Escuchar: Deja espacio, no rellenes el silencio y muestra que escuchas con preguntas de seguimiento que profundicen (eje, “¿qué te hace decir eso?”).
Ejemplos de preguntas poderosas para líderes
- “¿Qué fue lo más importante que aprendiste en este proyecto?”
- “¿Cuál es la mayor barrera que te impide avanzar y cómo podríamos reducirla?”
- “¿Qué opciones consideraste y por qué descartaste las otras?”
- “¿Qué resultado esperamos dentro de 30 días y qué pasos concretos lo acercan?”
- “¿Qué apoyo necesitarías de mí para que esto funcione?”
Errores comunes y cómo evitarlos
- Usar preguntas como ataque: no las disfraces de críticas.
- Apilar preguntas: pregunta y espera la respuesta. Luego haz la siguiente.
- Preguntar sin escuchar: la calidad de la pregunta se demuestra en la atención que le sigues.
- Preferir “por qué” para justificar: cambia “por qué” por “qué” o “cómo” cuando busques comprensión y no culpabilidad.